El Palacio de Miramar de San Sebastián se quedó pequeño para acoger a las más de 400 personas que acudieron el pasado 23 de enero a la inauguración de la exposición ‘Gregorio Ordóñez. La vida posible’. Representantes institucionales, compañeros de partido, amigos del exconcejal y un buen puñado de donostiarras se turnaron para acceder a la muestra por primera vez.
Más de cuarenta periodistas y 12 cámaras de televisión repasaron de la mano de su viuda, Ana Iríbar, el resumen de la vida del primer teniente de alcalde y parlamentario vasco por el Partido Popular asesinado por ETA, justo el día en el que se cumplían 25 años de su muerte.
Al acto acudieron el lehendakari Iñigo Urkullu, la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria; el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano; el presidente de las Juntas, Xabier Eceizabarrena o el alcalde de la ciudad, Eneko Goia, entre otros.
Los patronos de la fundación también estuvieron presentes. El expresidente del gobierno José María Aznar y su esposa Ana Botella; Jaime Mayor Oreja y María San Gil no se perdieron el acto. Les acompañaron miembros del PP como su presidente Pablo Casado, representantes de otros partidos y concejales donostiarras.
La inauguración contó además con la presencia del ex primer ministro francés Manuel Valls, premio Gregorio Ordóñez en 2017, del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi; del presidente de CAF, Andrés Arizkorreta y de representantes de empresas como el BBVA, Telefónica, el Grupo Santander y la Fundación Iberdrola.
